
Samsung ha empezado a mover ficha con One UI 8.5, una nueva gran versión de su capa sobre Android que ya se puede probar en fase beta en la familia Galaxy S25 en varios países. La compañía combina aquí cambios de diseño, más herramientas con inteligencia artificial y mejoras de seguridad pensadas para el día a día.
Esta actualización busca que el ecosistema Galaxy funcione de forma más unificada: desde crear y editar contenido con menos pasos, hasta compartir archivos entre móvil, tablet, PC o televisor casi como si fuera un único dispositivo. Todo ello, con nuevas barreras frente al robo y más control sobre lo que pasa con los datos del usuario.
Nueva beta de One UI 8.5: dónde, cuándo y en qué móviles
La compañía surcoreana ha activado ya el programa beta público de One UI 8.5, basado en Android 16, para propietarios de la serie Galaxy S25. Es una versión de pruebas pensada para pulir errores y validar las novedades antes de la salida estable.
De momento, la beta se limita a mercados específicos como Alemania, India, Corea del Sur, Polonia, Reino Unido y Estados Unidos, siguiendo el patrón habitual de Samsung. España y otros países europeos quedan, por ahora, fuera de esta primera oleada, algo ya bastante recurrente en las betas de One UI.
Para quienes tengan un Galaxy S25, S25+ o S25 Ultra en uno de esos mercados, la inscripción se realiza desde la app Samsung Members, entrando en el banner dedicado a la beta de One UI 8.5 para que el dispositivo descargue la actualización vía OTA. La marca suele lanzar varias compilaciones preliminares, de forma que se esperan varias versiones beta encadenadas antes de dar el visto bueno a la edición estable.
Samsung ha confirmado que One UI 8.5 debutará de forma estable con la familia Galaxy S26. El objetivo interno pasa por estrenarla en la primera parte de 2026, en una ventana que se sitúa tradicionalmente entre enero y febrero, y a partir de ahí iniciar el despliegue progresivo al resto de modelos compatibles.
Creación de contenido y Galaxy AI: Photo Assist se pone seria
Una de las grandes apuestas de One UI 8.5 está en las funciones de creación y edición de contenido, apoyadas en Galaxy AI. El renovado Asistente de fotos (Photo Assist) permite generar y modificar imágenes de forma continuada sin tener que ir guardando cada cambio por separado.
En la práctica, esto significa que se pueden encadenar varias herramientas de IA -como relleno generativo, ajustes inteligentes o recomposición- y, al terminar, consultar un historial de ediciones para decidir qué versiones guardar. La experiencia creativa se vuelve mucho más fluida, sin llenar la galería de copias intermedias.
Estas opciones requieren iniciar sesión con una cuenta Samsung y conexión de datos, y las imágenes generadas incluyen una marca visible que indica que han sido modificadas mediante IA. Es un detalle relevante de cara a la transparencia, sobre todo en un contexto donde las imágenes generadas empiezan a mezclarse con fotografías tradicionales.
One UI 8.5 también hace que compartir fotos y vídeos sea menos engorroso. Quick Share, el sistema de envío de archivos entre dispositivos Galaxy, ahora reconoce quién aparece en las imágenes y sugiere automáticamente esos contactos cuando se va a compartir, ahorrando búsquedas manuales y toques extra.
Además de estas sugerencias inteligentes, Quick Share incorpora nuevos filtros de seguridad para limitar quién puede enviar archivos al usuario. Entre las opciones se encuentra restringir el intercambio a dispositivos que hayan iniciado sesión previamente en las mismas cuentas de Samsung o Google, lo que reduce el riesgo de recibir archivos no deseados en espacios públicos.
Conectividad, ecosistema Galaxy y nuevas herramientas compartidas
Otro eje de One UI 8.5 es reforzar la continuidad entre dispositivos Galaxy. La nueva opción de Transmisión de audio (Audio Broadcast) utiliza Auracast y LE Audio para enviar sonido a varios dispositivos cercanos al mismo tiempo. No solo se comparte el audio multimedia, sino también la voz capturada por el micrófono del móvil.
Esta función está pensada para situaciones como visitas guiadas, charlas o eventos de grupo, donde un solo teléfono puede actuar como “megáfono” inalámbrico hacia auriculares compatibles cercanos. De momento, la disponibilidad de Transmisión de audio se limita a la gama más reciente, con protagonismo para la serie Galaxy S25.
En paralelo, Samsung amplía las posibilidades de Compartir almacenamiento (Storage Share). Desde la aplicación Mis Archivos, el usuario puede ver directamente el contenido de otros dispositivos vinculados a la misma cuenta Samsung, como tabletas Galaxy, ordenadores Galaxy Book e incluso televisores inteligentes recientes de la marca.
Esta integración permite acceder a documentos del móvil desde el PC o abrir archivos guardados en el teléfono en el televisor sin necesidad de estar copiando y pegando continuamente. Para que todo funcione, los dispositivos deben cumplir ciertos requisitos de versión de One UI, kernel y modelos mínimos, además de tener activados Wi‑Fi y Bluetooth.
La actualización también mejora la conexión rápida con pantallas externas mediante Smart View, con accesos directos que facilitan enviar la imagen del móvil a un monitor o TV en menos pasos. Es un guiño a quienes usan el teléfono como centro de trabajo ligero o para reproducir contenido en pantallas grandes.
Diseño, personalización y cambios en la interfaz
Más allá de las funciones de fondo, One UI 8.5 introduce un cambio visual apreciable en la interfaz de los Galaxy. El menú de ajustes del sistema, la pantalla de bloqueo, el panel de ajustes rápidos y varias aplicaciones propias de Samsung adoptan un diseño más limpio y organizado.
El Panel rápido gana protagonismo como zona de control principal del dispositivo. Se elimina la rígida cuadrícula tradicional para dar paso a una disposición mucho más flexible, que permite mover, redimensionar y reordenar controles según las necesidades del usuario. Algunos interruptores pueden, incluso, colocarse en formato vertical, ocupando más espacio visual para funciones críticas.
En la app de Ajustes, Samsung ha recortado descripciones y etiquetas secundarias bajo cada categoría, con el objetivo de reducir el ruido visual y hacer que la lista de opciones sea menos intimidante. La barra de búsqueda pasa a una zona inferior, en forma de pastilla, favoreciendo el uso a una mano, sobre todo en modelos de gran tamaño.
Aplicaciones nativas como Teléfono, Mensajes o Galería avanzan hacia una estética más unificada. Muchas de ellas abandonan la barra de pestañas a lo ancho y adoptan una barra de pestañas flotante en forma de píldora, alineándose con las tendencias de diseño actuales y ganando en claridad.
La navegación también se hace más accesible con botones de búsqueda y retroceso que permanecen visibles como elementos superpuestos mientras se hace scroll por el contenido, de modo que siempre están a mano sin tener que desplazarse hasta la parte superior.
Pantalla de bloqueo, widgets y aplicaciones del sistema
La pantalla de bloqueo también recibe su ración de novedades. One UI 8.5 amplía las opciones de fuentes y estilos para el reloj, permitiendo configuraciones más personales sin necesidad de recurrir a temas de terceros.
Cuando se utiliza una foto con personas o animales como fondo, el sistema es capaz de recolocar de forma automática el reloj y los widgets para evitar que tapen los rostros principales. Es un detalle menor, pero hace que las pantallas de bloqueo resulten más cuidadas de serie.
El widget del tiempo evoluciona con información más rica sobre precipitaciones y calidad del aire. Ahora puede mostrar gráficos horarios más detallados y datos sobre distintos tipos de polen presentes en el entorno, algo especialmente útil para personas con alergias.
Las alarmas pueden configurarse para mostrar la previsión meteorológica nada más sonar, de forma que el usuario tenga un vistazo rápido al clima del día sin abrir ninguna aplicación adicional.
En el apartado de salud, Samsung Health introduce un seguimiento más completo de medicación y actividades de Mindfulness, así como la posibilidad de crear pequeños resúmenes visuales con fotos y estadísticas de entrenamientos para compartir en redes sociales.
Bixby y otras funciones con IA mejorada
Bixby, el asistente de Samsung, recibe un empujón con mejor comprensión del lenguaje natural. La idea es que el usuario pueda formular peticiones de forma más coloquial y que el asistente entienda qué ajustes modificar o qué acción ejecutar, incluso si no se menciona el nombre exacto de la función.
La actualización incluye un modo de respuesta más rápida para consultas sencillas y acceso más cómodo al historial de conversaciones, de manera que se puedan revisar interacciones anteriores sin perder tiempo.
En paralelo, la IA se integra en más áreas del sistema, desde la administración de recordatorios hasta las sugerencias de contenido que puede compartirse con contactos frecuentes, siempre con la opción de desactivar o limitar estas funciones para quienes prefieran una experiencia más básica.
One UI 8.5 también potencia algunas utilidades del sistema como la calculadora, que ahora puede leer el contenido del portapapeles para sugerir operaciones directamente, o la grabación de pantalla, que permite seleccionar únicamente una parte de la pantalla para capturar, algo útil para tutoriales o formación.
Batería, consumo energético y rendimiento
Otro bloque importante es la gestión de la batería y el consumo de energía. Con One UI 8.5, los gráficos de uso pasan a ser más detallados y fáciles de interpretar, mostrando con mayor claridad qué aplicaciones o procesos están tirando más del consumo.
El modo ahorro de energía se vuelve más agresivo y configurable, con opciones adicionales para recortar funciones no esenciales cuando la batería se está agotando. El objetivo es exprimir al máximo los últimos puntos de carga sin dejar el teléfono inservible.
Estas mejoras se acompañan de ajustes finos en el rendimiento general del sistema, que deberían traducirse en transiciones más suaves y menor carga de fondo innecesaria, aunque los resultados concretos dependerán mucho del dispositivo concreto y de su estado de uso.
hardware reciente y las optimizaciones de software permiten esperar que, en equipos como los Galaxy S25 y los próximos S26, se mantenga mejor la estabilidad del rendimiento con el paso del tiempo.
Todo ello se integra con las políticas de actualización de Samsung, que contemplan varios años de soporte de sistema y parches de seguridad en buena parte de su gama media y alta, un aspecto clave para que estas mejoras sean realmente aprovechables en Europa.
Seguridad, antirrobo y privacidad en One UI 8.5
La seguridad es uno de los frentes donde Samsung más insiste con One UI 8.5. La nueva función de Protección contra robo (Theft Protection) añade capas extra para mantener el teléfono y los datos a salvo en casos de pérdida o sustracción.
Entre las medidas destacadas está el bloqueo automático tras varios intentos fallidos de autenticación con huella, PIN o contraseña. Si alguien intenta forzar el acceso repetidamente, la pantalla se bloquea y el sistema exige una verificación más estricta antes de permitir cambios sensibles.
Además, se amplía la verificación de identidad a más parámetros de configuración, de forma que modificarlos requiere confirmar la identidad del propietario. Esto reduce la posibilidad de que, en caso de robo, se desactiven funciones de localización o se cambien ajustes clave sin autorización.
Las mejoras de seguridad se completan con más opciones de control sobre qué se comparte y con quién en funciones como Quick Share, junto a protecciones adicionales contra solicitudes de archivos procedentes de desconocidos.
Todo este conjunto de cambios busca adaptarse a un escenario en el que los móviles agrupan cada vez más datos sensibles -desde pagos hasta documentación personal- y en el que los ataques y estafas son cada vez más sofisticados.
Dispositivos compatibles y tiempos aproximados de actualización
Aunque la beta se ha estrenado únicamente en la familia Galaxy S25, One UI 8.5 está pensada para un rango bastante amplio de dispositivos Galaxy, abarcando gamas S, Z, A y Tab, siempre que cumplan los requisitos de soporte definidos por Samsung.
El calendario de despliegue estable seguirá una estrategia por fases. Primero llegarán los Galaxy S26 con One UI 8.5 preinstalada, después se irán actualizando los buques insignia recientes -incluidos plegables Galaxy Z- y, finalmente, los modelos más populares de gama media.
Las filtraciones apuntan a que la mayoría de dispositivos compatibles empezarían a recibir la versión estable entre abril y junio de 2026, aunque esa ventana puede variar según región y modelo. Es previsible que Europa occidental se sitúe entre las primeras zonas en recibir las actualizaciones en series como Galaxy S y Z.
Los modelos de gama media actualizados en los últimos ciclos también están en la lista, si bien su turno podría retrasarse algo más dentro de ese mismo periodo o incluso al segundo semestre, dependiendo del país.
En cualquier caso, la combinación de hoja de ruta oficial -con el estreno en los Galaxy S26- y los patrones de actualización de años anteriores permite hacerse una idea razonable de cuándo podría llegar One UI 8.5 a cada dispositivo, aunque siempre con margen para posibles ajustes.
Con todo lo que trae encima de la mesa, One UI 8.5 se perfila como una actualización de peso: refuerza la creación de contenido apoyada en IA, mejora la vida en el ecosistema Galaxy con nuevas opciones de compartición y continuidad, endurece la seguridad frente a robos y hace que la interfaz resulte algo más clara y personalizable, todo ello con un despliegue que arranca en los Galaxy S25 en modo beta y que terminará, con paciencia, llegando a buena parte del catálogo reciente de Samsung en Europa.
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