
La herramienta oficial de Microsoft para preparar instalaciones, la Media Creation Tool de Windows 11, está dando problemas en equipos con Windows 10. Diversas pruebas confirman que la aplicación se cierra de forma repentina al iniciarse, impidiendo crear el USB o DVD de arranque para una instalación limpia.
El fallo se asocia a la versión 26100.6584 de la MCT publicada el 29 de septiembre, y Microsoft ya lo ha reconocido públicamente. El contratiempo llega, además, cuando muchos usuarios planeaban migrar en el último momento por la cercanía del fin de soporte de Windows 10, lo que agrava la situación por pura cuestión de timing.
Qué ha pasado exactamente
Según la información oficial, la iteración 26100.6584 de la Media Creation Tool puede no funcionar como se espera en Windows 10 y cerrarse sin mostrar mensajes de error. La incidencia se ha observado especialmente en equipos con la última rama estable del sistema, y no parece depender de un hardware concreto.
Microsoft indica que está investigando el origen y trabaja en una corrección que llegará mediante una actualización de la propia herramienta. Mientras tanto, la compañía remite a métodos alternativos para completar la actualización o la instalación.
El alcance práctico es claro: quienes pretendían usar la MCT para descargar la ISO y preparar un medio de arranque se encuentran con un cierre inesperado que aborta el proceso. Esta utilidad es un pilar habitual para realizar una instalación limpia, recuperar sistemas o actualizar de forma controlada.
Conviene recordar, además, que la MCT de Windows 11 no es compatible con dispositivos Arm64 que ejecuten Windows 10, una limitación histórica que se mantiene y que conviene tener presente a la hora de elegir procedimiento.
A quién afecta y por qué es un problema ahora
El inconveniente afecta a quienes iban a dar el salto desde Windows 10 en estos días, justo cuando llega el fin de soporte. Tras esa fecha, el sistema deja de recibir parches de seguridad de forma general, con el consiguiente incremento del riesgo si se sigue usando sin medidas adicionales.
La situación es especialmente delicada para los equipos que sí cumplen requisitos de Windows 11 y habían reservado este fin de semana para la migración. Por su parte, quienes no alcanzan las exigencias de hardware pueden usar herramientas de terceros —como Rufus— para preparar el medio y omitir comprobaciones, siempre con cautela y bajo responsabilidad del usuario.
Alternativas seguras mientras llega el parche
La vía más simple para muchos es usar Windows Update desde Configuración en Windows 10. Si el equipo es compatible, aparecerá la opción de “Descargar e instalar” Windows 11, conservando archivos y la mayoría de aplicaciones.
Otra opción oficial es el Asistente de instalación de Windows 11, que guía el proceso paso a paso sin necesidad de crear un USB. Es adecuado cuando no se requiere una instalación desde cero y se desea minimizar complicaciones.
También puedes descargar la ISO oficial de Windows 11 desde la web de Microsoft y crear el USB de arranque manualmente. Herramientas como Rufus permiten grabarla en una memoria USB en pocos minutos. Antes de empezar, haz copia de seguridad, verifica el hash de la ISO y asegúrate de que el equipo arranca desde USB.
Rufus aporta funciones avanzadas como omitir requisitos de TPM y Arranque seguro, desactivar la telemetría inicial o facilitar el uso de cuentas locales durante el primer inicio. Son opciones útiles en equipos con limitaciones, pero conviene entender sus implicaciones y usarlas con prudencia.
Si tu dispositivo es Arm64 y estás en Windows 10, ten en cuenta que la MCT no es la herramienta adecuada; tendrás que optar por la descarga directa de la imagen que corresponda a tu arquitectura y un proceso de creación de medios compatible.
Consejos prácticos para evitar errores
Antes de actualizar, realiza una copia de seguridad completa, libera espacio en disco y actualiza controladores esenciales. Ejecutar las herramientas como administrador y desactivar temporalmente el antivirus puede evitar bloqueos durante el proceso.
Si necesitas una instalación limpia, prepara el USB con la ISO oficial y arranca el equipo desde esa unidad para un entorno más controlado. Este enfoque reduce conflictos por configuraciones heredadas o controladores residuales de la instalación anterior.
Qué dice Microsoft y plazos previstos
La compañía reconoce el error en la Media Creation Tool y afirma que publicará una actualización para resolverlo. No hay una fecha cerrada, pero se lanzará como nueva versión de la herramienta en cuanto esté lista, por lo que conviene vigilar la página de soporte.
Con el problema identificado y un arreglo en camino, la recomendación más sensata es optar por los métodos alternativos oficiales (Windows Update, Asistente o ISO) y, si procede, apoyarse en utilidades como Rufus para crear el medio de arranque hasta que la MCT vuelva a funcionar con normalidad.