Xbox ha despejado dudas sobre su rumbo de hardware: Sarah Bond confirma que ya trabajan en la próxima generación en colaboración con AMD, con el proyecto instalado en fases de diseño y prototipado. Las declaraciones llegan tras semanas de debate por precios, rumores de repliegue y la llegada de dispositivos portátiles asociados al ecosistema.
La directiva insiste en que el lanzamiento de ROG Xbox Ally (y Ally X) de ASUS no implica abandonar las consolas propias: según Bond, se trata de ofrecer más opciones de juego mientras el nuevo hardware de Xbox avanza. El mensaje es claro: no hay marcha atrás en consolas, aunque la marca explore nuevos formatos y socios.
Qué ha dicho exactamente la presidenta de Xbox
En entrevistas recientes, Bond señala que el equipo está volcándose en probar prototipos y cerrar el diseño del siguiente “hardware”. Incluso ha mostrado los laboratorios donde se trabaja en la futura generación, aludiendo a un posible “cambio de ritmo” en cómo Xbox plantea sus dispositivos sin perder de vista la experiencia de consola.
Llama la atención que hable de “hardware” y no siempre de “consola”. Informaciones publicadas por Variety apuntan a que se desarrollan sucesoras de Xbox Series X y Series S y que no se descartan nuevos factores de forma; no obstante, no hay confirmación oficial de especificaciones ni diseños finales.
¿Consola clásica, portátil o varias máquinas?
La estrategia podría pasar por múltiples dispositivos dentro del ecosistema, manteniendo la línea de opciones para distintos perfiles de usuario. Se ha especulado con la continuidad de dos configuraciones (una más potente y otra más asequible) y con formatos portátiles o híbridos, aunque por ahora son escenarios sobre la mesa sin anuncio firme.
Lo que sí es rotundo es el compromiso de Microsoft con el segmento de consolas propias: la sucesora de Series X|S está en camino, independientemente de que conviva con hardware de terceros y soluciones en la nube.
AMD, pieza clave del desarrollo técnico
Bond reitera la colaboración con AMD para la nueva generación, una alianza que previsiblemente se traducirá en CPU y GPU personalizadas. El objetivo apunta a mejorar rendimiento, eficiencia y capacidades gráficas, con margen para funciones avanzadas como aceleración de IA o ray tracing, si bien estos extremos se manejan como posibilidades y no como confirmaciones.
Sin calendario ni hoja de ruta pública, el proyecto se encuentra en fases internas de prototipo y validación. La compañía evita plazos concretos, algo habitual en etapas tempranas de I+D.
Ecosistema: más opciones de juego y compatibilidad
La propuesta de Xbox pivota sobre un ecosistema que integra consola, PC y juego en la nube. Bond subraya el objetivo de jugar lo que quieras, donde quieras y con quien quieras, reforzando Windows con una experiencia de «pantalla completa de Xbox» y un programa de compatibilidad para portátiles que identifique los juegos mejor adaptados a ese formato.
Este enfoque no sustituye a la consola, sino que la acompaña: Game Pass, la retrocompatibilidad y el juego en la nube seguirán siendo palancas clave para cohesionar la experiencia entre dispositivos.
ROG Xbox Ally: qué significa y cómo se posiciona
La aparición de ROG Xbox Ally, fabricada por ASUS con Windows y orientada al catálogo de PC y Game Pass, generó dudas sobre el futuro de las consolas. Bond aclara que es una vía complementaria para innovar más rápido y dar otra opción a los jugadores mientras avanza la próxima Xbox.
Sobre precios, ASUS fija el PVP de su dispositivo: 599 € para ROG Xbox Ally y 899 € para Ally X, con salida comercial el 16 de octubre de 2025 en Europa. Según la directiva, la demanda inicial ha sido positiva, con buen ritmo de reservas.
Contexto de mercado: ajustes de precio en consolas y servicios
En paralelo, se han producido revisiones de PVP en España y la UE: 599,99 € para Xbox Series X, 399,99 € para Xbox Series S (1 TB) y 349,99 € para Series S (512 GB). Además, el plan Game Pass Ultimate pasó a 26,99 €/mes para nuevas altas desde el 1 de octubre; el cambio se aplica a suscriptores actuales desde el 4 de noviembre.
Estas decisiones en pricing se leen junto al empuje del ecosistema: más opciones de acceso, acuerdos con terceros y una nueva generación en camino con AMD como socio técnico.
Calendario y expectativas: lo que se sabe y lo que no
No hay fecha ni nombre oficial para la sucesora de Series X|S. Algunas fuentes del sector sitúan el horizonte temporal alrededor de 2027, pero se trata de estimaciones no confirmadas. Microsoft, por su parte, mantiene que sigue invirtiendo activamente en futuras consolas y dispositivos propios.
Hasta que haya anuncio formal, la lectura más prudente es que Xbox prepara varios escenarios de producto, priorizando compatibilidad, rendimiento y variedad de precios, mientras observa la respuesta del mercado a los formatos portátiles y las sinergias con la nube.
La posición de Xbox queda bien definida: la nueva generación de hardware está en desarrollo con AMD, las consolas seguirán siendo un pilar y el ecosistema sumará alternativas como ROG Xbox Ally y el juego en la nube; queda por conocer cómo encajarán forma, potencia y precio cuando llegue el momento de presentar la sucesora de Series X|S.
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