Guía completa de Grounded: primeros pasos, trucos y 100%

Guía Grounded

Si acabas de caer, literalmente, en el césped de Grounded y no sabes ni por dónde te da el aire, tranquilo: esta guía completa de Grounded en español está pensada justo para ti. Vamos a repasar desde los primeros minutos de partida hasta los requisitos para sacarle el 100% al juego, pasando por sistema de misiones, construcción, análisis de recursos, insectos y mucho más.

A lo largo de estas líneas vas a encontrar consejos prácticos, trucos y explicaciones sacadas de la experiencia de juego y de las mejores guías existentes, pero reescritas con un lenguaje cercano y claro. La idea es que puedas orientarte tanto si empiezas desde cero como si quieres pulir tu partida e ir a por todos los logros, jefes opcionales y coleccionables.

¿Qué es Grounded y por qué engancha tanto?

Qué es Grounded

Grounded es un juego de supervivencia en primera y tercera persona en el que tu grupo de chavales aparece encogido hasta el tamaño de una hormiga en el jardín de una casa suburbana. El planteamiento recuerda muchísimo a la clásica “Cariño, he encogido a los niños”: objetos cotidianos se convierten en montañas, y cualquier insecto es ahora una amenaza seria.

Actualmente puedes jugarlo en PC y Xbox, tanto en modo individual como en cooperativo en línea. Nació como título en acceso anticipado y ha ido ampliando contenido a base de actualizaciones, añadiendo zonas, laboratorios, jefes, mutaciones, recetas y un sistema de progresión cada vez más completo.

La gracia del juego está en que combina supervivencia clásica (sed, hambre, refugio, crafteo) con una historia que se va desvelando poco a poco a través de misiones, laboratorios y datos repartidos por todo el patio. No es el típico sandbox totalmente libre: aquí la narrativa y los objetivos tienen bastante peso.

Advertencia importante: el modo aracnofobia

Modo aracnofobia Grounded

Grounded está plagado de insectos de todo tipo: pulgones, mariquitas, mosquitos, hormigas y, por supuesto, arañas. Estas últimas pueden ser muy impresionantes y generar rechazo incluso aunque no tengas una fobia muy fuerte, así que los desarrolladores incluyeron un modo específico para ayudar con esto.

Dentro del menú de opciones encontrarás, en el apartado de Accesibilidad, el llamado “modo aracnofobia”. Lo ideal es que lo actives incluso antes de empezar tu partida, así no te llevas ningún susto innecesario al inicio. Desde el propio menú principal puedes entrar a Opciones y luego a Accesibilidad, o ir directamente al cuadro de accesibilidad si el juego lo resalta.

Este modo permite alterar de forma progresiva la apariencia y el sonido de las arañas. En lugar de ver modelos realistas, puedes ir simplificándolos hasta que queden reducidos prácticamente a un par de círculos con ojos y con efectos de sonido suaves o casi inexistentes.

La escala del modo aracnofobia va de 1 a 5, donde 1 es el aspecto completo y 5 es la versión más simplificada. Si las arañas te ponen demasiado nervioso, selecciona el nivel 5 y guarda los cambios. De este modo podrás disfrutar del juego sin renunciar a contenido ni mecánicas, pero sin enfrentarte a modelos que te resulten desagradables.

Cómo empezar: modos de juego, personajes y variables

Al arrancar Grounded, lo primero que verás es la opción de iniciar sesión con tu cuenta de Xbox Live. Si quieres usar el multijugador online, es obligatorio iniciar sesión. Si no te interesa jugar en cooperativo o no quieres crear cuenta, puedes pulsar Escape y saltarte este paso, pero te quedarás solo con el modo individual.

Grounded ofrece dos formas principales de juego: modo Individual y modo Multijugador en línea. En individual podrás jugar sin conexión, explorando el jardín por tu cuenta. El multijugador admite hasta 4 jugadores (tú y tres personas más) compartiendo partida y progreso, lo que hace mucho más llevadera la recolección de recursos, la construcción de bases y el enfrentamiento con jefes complicados.

Después tendrás que elegir personaje entre Max, Willow, Pete y Hoops (Pívot en algunas traducciones). Aquí no hay clases ni estadísticas únicas para cada uno: la elección es puramente estética y de voz. Escoge simplemente el que más te guste, porque no condiciona tu estilo de juego ni las mutaciones que puedas desbloquear.

El juego también permite ajustar varias “variables del juego” o modos de dificultad. Hay diferentes configuraciones que influyen en el daño recibido, la agresividad de los enemigos, el desgaste del equipo o el nivel de castigo al morir. Puedes optar por un modo más relajado si solo quieres disfrutar de la exploración, o uno más exigente si buscas un desafío de supervivencia serio.

Interfaz, accesos rápidos y el dispositivo PULGUI / SCA.B

Una vez despiertes en la gruta inicial y des unos pasos, el juego te mostrará su interfaz principal, bastante limpia pero cargada de información útil. Todo se organiza en una única ventana con pestañas, a la que puedes acceder desde el menú o usando atajos del teclado.

Por ejemplo, con la tecla “i” abres el inventario y el menú de equipo, mientras que con la tecla “m” puedes ver el mapa completo del jardín con marcadores de laboratorios, estaciones de campo y puntos de interés que hayas descubierto.

En la esquina inferior izquierda se encuentra tu dispositivo de muñeca, conocido como PULGUI o SCA.B. Verás dos círculos principales que indican el nivel de hambre y sed, y dos barras laterales que representan tu resistencia (aguante al correr, atacar, nadar…) y tu salud. Es vital que te acostumbres a mirar esta zona con frecuencia.

En la parte inferior central verás la barra de acceso rápido con las teclas del 1 al 8. Ahí puedes colocar armas, herramientas, comida, pociones de curación y otros objetos de uso habitual. Cambias de ranura pulsando el número correspondiente, lo que te permite reaccionar rápido ante un combate o una emergencia.

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Cuando estés cerca de algo importante, como una estación de campo, un laboratorio o una localización clave, el dispositivo empezará a emitir pitidos. Eso significa que hay ciencia bruta, datos o elementos relevantes cerca, así que merece la pena investigar la zona alrededor.

Misiones principales y progreso de la historia

Si eliges jugar en las dificultades estándar (Suave, Medio y similares), tendrás acceso a una cadena de misiones principales que funcionan como columna vertebral de la historia. Empiezas despertando en una pequeña cavidad subterránea, frente a una maleta con la silueta de cuatro personas, sin recordar quién eres ni cómo has acabado encogido.

Estas primeras misiones te guían por lo básico: cómo saciar hambre y sed, cómo montarte un primer refugio y cómo utilizar las estaciones de campo. Es muy recomendable seguir los objetivos que te marcan al principio, en lugar de ponerte a deambular sin rumbo por todo el jardín.

A medida que avances, las misiones principales irán desbloqueando nuevos laboratorios, zonas del mapa, conversaciones con BURG.L y el doctor Wendell. También suelen estar ligadas a hitos de progresión del personaje, como acceder a mejores herramientas, armaduras o recetas especiales en la tienda de ciencia.

No hace falta que corras por la historia si no te ves preparado. Si afrontas ciertas misiones mal equipado, vas a morir una y otra vez, especialmente frente a bichos grandes o en áreas avanzadas del mapa. Lo ideal es alternar historia principal con exploración libre, farmeo de materiales y mejoras de equipo.

Para quienes disfrutan de la trama, ir recopilando los datos, registros de audio y notas que vas encontrando en los laboratorios añade mucha profundidad al mundo del juego, explicando la investigación de Ominent, los experimentos de Wendell y el origen de tu situación.

Necesidades básicas: sed, hambre y refugio

Como en cualquier survival, en Grounded tu prioridad inicial es que el personaje no muera ni de hambre ni de sed. Los indicadores del dispositivo de muñeca se vacían con el paso del tiempo y según lo que hagas (correr, combatir, etc.). Ignorarlos demasiado acabará en desmayos o muerte.

Al principio no dispondrás de fogatas, recipientes de agua ni sistemas de almacenamiento, así que tendrás que tirar de opciones seguras de comida y bebida en estado casi “natural”. Beber agua estancada de los charcos o comerte carne cruda suele conllevar efectos negativos como veneno o pérdida de salud.

Lo ideal es buscar gotas de rocío que cuelgan de las hojas de hierba para beber sin riesgo, y frutas, setas u otros recursos comestibles básicos que no causen enfermedades. En cuanto tengas acceso a una fogata y recipientes, podrás cocinar carne y hervir agua para reducir los peligros.

El otro gran pilar de la supervivencia es el refugio. Estás en un entorno lleno de criaturas, algunas pacíficas y otras muy agresivas. Pasar la noche al raso es casi una invitación a que te destrocen, sobre todo en zonas con arañas, chinches o bichos grandes.

Desde muy temprano el juego pone a tu disposición el plano de un pequeño refugio básico, que te permite dormir y avanzar ocho horas de golpe. Dormir resetea la noche con cierta seguridad y te libra de muchos peligros. Más adelante, desbloquearás paredes, puertas, suelos y techos para construir una base completa, protegida contra la mayoría de insectos.

Conforme vayas analizando nuevos recursos, obtendrás estructuras adicionales para reforzar tu base: vallas, escaleras, cofres, trampas, luz, soportes para secar comida, etc. Si quieres profundizar en la construcción, es recomendable dedicar un buen rato a farmear materiales específicos y a experimentar con diseños de bases en altura o sobre agua para minimizar ataques.

El sistema de análisis, recetas y el Intelecto

Repartidas por todo el jardín están las estaciones de campo, una especie de mini laboratorios donde puedes interactuar con terminales para analizar recursos. Cada vez que recojas un material nuevo (fibra de planta, pétalos, partes de insecto, minerales, etc.), deberías llevarlo a una de estas estaciones.

Al analizar un objeto lograrás tres cosas: desbloquear las recetas de crafteo relacionadas con ese material, obtener puntos de ciencia bruta y sumar progreso a tu nivel de Intelecto. Normalmente cada tipo de recurso puede analizarse una vez, y algunas recetas importantes dependen de haber escaneado los componentes adecuados.

El Intelecto funciona como el “nivel” general del personaje. Cada vez que subes de nivel, se activan nuevas recetas globales, incluso aunque todavía no hayas analizado todos los objetos necesarios. Esto abre el abanico de construcciones, armas, armaduras y objetos de utilidad disponibles en tu pestaña de fabricación.

La ciencia bruta es una moneda especial que se consigue precisamente analizando recursos, explorando el entorno (encontrarás esferas rosadas brillantes que al tocarlas te otorgan puntos) o completando misiones de BURG.L desde las terminales ASL. Esta moneda se usa para dos cosas: subir Intelecto y comprar mejoras y planos en la tienda de ciencia.

En cualquier estación de campo con acceso a la terminal ASL podrás gastar ciencia bruta en paquetes de recetas, mejoras de escaneo (como el detector de molares o SCA.B) y otros desbloqueos de calidad de vida. Planifica bien tus compras para priorizar lo que más te facilite la supervivencia y el movimiento por el jardín.

Insectos, facciones y el uso del 4-Ojos / PEEP.R

El patio de Grounded es un ecosistema lleno de bichos distintos, cada uno con su comportamiento. El juego clasifica las criaturas en tres grandes grupos: neutrales, enfadadas (hostiles) e inofensivas. Entender esta clasificación te evitará muchos sustos innecesarios.

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Los insectos neutrales normalmente pasan de ti si no les tocas las narices. Esto incluye criaturas que pueden ser bastante duras en combate, como ciertas hormigas o mariquitas. Si las atacas o invades su territorio, cambiarán de actitud y responderán con fuerza.

Las criaturas enfadadas son hostiles por defecto: te detectan y van a por ti en cuanto te acerques demasiado. Aquí entran dentro arañas, chinches y otros bichos grandes de zonas avanzadas. Cuando empieces, es mejor que aprendas a identificarlas a distancia y, si hace falta, pegues la vuelta.

Los insectos marcados como inofensivos son poco peligrosos. Algunos pueden contraatacar, pero su daño y resistencia son bajos. Son ideales para practicar combate, conseguir recursos básicos y acostumbrarte a esquivar y bloquear.

Para registrar información detallada de cada criatura, el juego te da una utilidad llamada 4-Ojos o PEEP.R. Al usarla (normalmente con la tecla asociada al modo prismáticos) entras en un modo de observación; si apuntas a un bicho y lo “escaneas”, se añadirá a tu base de datos de criaturas.

En esta base de datos verás a qué grupo pertenece cada insecto, además de sus resistencias, debilidades y tipo de daño que mejor le afecta. Esta información es clave para optimizar tus armas y preparar enfrentamientos contra jefes o enemigos duros, evitando golpes que apenas les hagan cosquillas.

Grounded al 100%: requisitos para la Super Victoria

Si tu objetivo no es solo sobrevivir, sino exprimir Grounded hasta conseguir el 100%, hay una lista bastante larga de tareas que cumplir. Varias de ellas están relacionadas entre sí y muchas requieren equipamiento avanzado, paciencia y buena organización.

Lo primero es completar la historia principal al completo. Asegúrate de terminar todos los objetivos relacionados con Wendell y BURG.L, y de agotar sus diálogos siempre que sea posible. Aunque no está del todo claro si hablar todas las opciones es obligatorio para el 100%, es recomendable hacerlo para no dejar cabos sueltos.

En cuanto a mutaciones, si juegas en cooperativo tendrás que desbloquear el primer nivel de las 41 mutaciones disponibles. Si juegas en solitario, el número se reduce a 40 porque la mutación “Amigo confiable” ya no es necesaria en ese modo. Las mutaciones se desbloquean realizando determinadas acciones (pegar, correr, bloquear, recibir daño, etc.).

También tendrás que recoger todos los molares de leche del patio, tanto básicos como mega. Hay 123 en total y necesitarás, como mínimo, un martillo de nivel II para empezar a romper muchos de ellos. Conseguir la mejora SCA.B que detecta molares cercanos te facilita mucho la tarea, ya que te avisará cuando estés al lado de uno.

Otro coleccionable importante son los 51 esquemas de sabor SCA.B, repartidos por todo el jardín. Al igual que con los molares, puedes desbloquear una mejora para que el dispositivo te avise cuando estás cerca de uno, pero probablemente tendrás que consultar ubicaciones concretas para los más escondidos.

Laboratorios, chips BURG.L y misiones ASL

En el mundo hay 8 laboratorios principales que deben completarse para considerar el juego pasado al 100%. De estos, 6 contienen chips BURG.L que tendrás que llevarle al simpático robot para mejorar su tienda y avanzar en la historia oculta del patio.

Los laboratorios con chip son, entre otros, el Laboratorio de la Niebla, el del Seto, el Hormiguero Negro, el Estanque, el Arenero y el Tocón. Estos proporcionan 4 Super Chips y 2 chips normales. Además, están el Laboratorio Bajo el Cobertizo y el Laboratorio Misterioso; estos dos últimos no aportan chip estándar pero sí son críticos para comprender el trasfondo y para ciertos jefes.

En total existen 11 chips tecnológicos BURG.L repartidos por el jardín: 4 son Super Chips y 7 son chips normales. Aunque 6 se obtienen en los laboratorios, te faltará recoger uno en el Hormiguero Rojo y otros 4 que están dentro de cofres cerrados, para los cuales necesitarás encontrar primero las llaves correspondientes.

BURG.L también te encarga 100 misiones o encargos secundarios, accesibles desde las terminales ASL. Muchas se completan casi sin darte cuenta mientras exploras, mejoras equipo o avanzas la historia, pero otras son más específicas (matar ciertos bichos, visitar lugares concretos, fabricar elementos especiales…). Tendrás que terminarlas todas.

Con cada chip que entregas, se amplía el catálogo de la tienda de ciencia de BURG.L. Para el 100% tendrás que comprar absolutamente todo lo permanente que ofrezca, incluyendo conjuntos de letreros. Lo único que puedes ignorar sin perder el porcentaje completo son los sets de letreros mensuales de tiempo limitado.

Tarjetas de criaturas, reinas de hormigas y jefes opcionales

Dentro del menú de Datos hay un apartado dedicado a las tarjetas de criaturas, que se obtienen usando el PEEP.R sobre cada tipo de bicho. Para lograr el 100% tendrás que desbloquear las 71 tarjetas existentes: 8 de criaturas neutras, 48 de enfadadas y 15 de inofensivas.

No basta con observarlas: también es necesario derrotar al menos a un ejemplar de cada criatura que sea matable. Eso significa enfrentarte a enemigos que quizá hayas estado esquivando en toda tu partida, así que tarde o temprano tendrás que armarte bien y afrontarlos.

Un caso especial son las reinas de hormiga roja, negra y de fuego. Tendrás que “tratar” con las tres, lo que implica hacerte amigo de ellas utilizando ofrendas de amistad específicas. Estas ofrendas se compran en la tienda de ciencia de las terminales ASL tras conseguir los chips tecnológicos asociados.

Convertirte en aliado de las reinas te otorga las tarjetas de las hormigas bebé correspondientes, que también cuentan para el registro de criaturas. Si las ignoras, tu progreso de datos se quedará siempre incompleto aunque el resto del jardín esté barrido.

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Además de los jefes ligados a la historia, existen 5 jefes opcionales que debes derrotar: cuatro son grandes bichos invocables (Madre de la Prole, Mantis Orquídea, Reina Avispa y Madre de la Prole Infectada) y el quinto es un jefe máquina, el Director Schmector, al que te enfrentas en el Laboratorio Misterioso.

Cada jefe de bicho requiere localizar las notas de receta de su objeto de invocación y fabricar dicho objeto en el lugar adecuado. La Madre de la Prole Infectada es el reto más duro del juego, ya que exige haber derrotado antes a todos los demás jefes de bicho y haber accedido al Laboratorio Misterioso para conseguir la receta.

Al derrotar al Director Schmector desbloquearás el llamado “final bueno” del juego, un requisito importante si quieres considerar la historia totalmente cerrada y ver todas las variantes de desenlace disponibles.

Datos y coleccionables: Wendell, Ominent y Sitios y maravillas

El apartado de Datos del menú es uno de los más extensos y complicados de completar. Aquí se agrupan 244 objetos de datos distintos, divididos en varias categorías como registros de Wendell, documentos de Ominent, archivos de BURG.L, productos, recetas, llaves, notas de jefes y un misterioso grupo de “???” entre otros.

Los datos de Wendell se organizan en segmentos como Tiempo en Ominent, Laboratorio del Estanque, Desarrollo SPAC.R, Laboratorio del Seto, Laboratorio de la Niebla, Laboratorio del Hormiguero Negro, Laboratorio Bajo el Cobertizo y Varios. Cada uno acumula cierto número de entradas que tendrás que localizar revisando bien cada laboratorio y sus alrededores.

En la categoría de Ominent encontrarás Notas y un bloque de Datos, mientras que en la sección de BURG.L hay datos de transcripciones, archivos asociados a chips tecnológicos y superchips. Muchas de estas entradas van ligadas a tu progreso de historia, así que es difícil que las pierdas si registras bien cada zona.

La parte de “Cosas” incluye subcategorías como Productos, Notas de recetas, Llaves, Notas de jefes y el grupo ???. Varias de estas subsecciones no muestran contador numérico, lo que te obliga a contar manualmente los elementos que tienes para saber si te falta alguno. Conviene ir revisándolo de vez en cuando para no volverte loco al final de la partida buscando el que sobra.

En “Sitios y maravillas” aparecen puntos de referencia repartidos por zonas: Praderas, Estanque, Montón de basura, Arenero, Mesa de picnic, Niebla, Seto, Praderas superiores y Bajo el Cobertizo. Casi todos se descubren explorando de forma relativamente natural o avanzando en la historia, pero hay uno especialmente escondido cerca del Estanque.

En la orilla opuesta al Roble, al otro lado del agua, hay un hueco en la pared que conduce a una localización secreta. Solo podrás acceder a ese punto una vez estés muy avanzado en el juego, prácticamente en la recta final. Este marcador es uno de los que más suele atascar a los jugadores que persiguen el 100% de Sitios y maravillas.

Para asegurarte de no dejarte nada, es recomendable hacer revisiones periódicas de la pestaña de Datos, especialmente en las secciones sin numeración. Si cruzas la información con la de los laboratorios y zonas que ya has despejado, te será más fácil detectar qué área te falta por rebuscar.

Grounded 2 y la continuidad de la saga

Con el lanzamiento de Grounded 2 en acceso anticipado, muchos jugadores se han animado a volver al jardín o a descubrirlo por primera vez. La secuela mantiene la esencia de supervivencia cooperativa en un entorno doméstico a escala microscópica, pero introduce nuevos biomas, sistemas de progresión y desafíos.

Grounded 2 se ha estrenado el 29 de julio de 2025 en acceso anticipado para PC y Xbox, con una duración aproximada de unas 13-14 horas para la línea principal, ampliable si quieres perderte en misiones secundarias, construcción de bases y coleccionables. Al igual que el primero, está pensado para disfrutar tanto en solitario como en compañía.

Si nunca has tocado la saga, conviene tener claros los conceptos básicos de recolección de materiales, gestión de hambre y sed, y uso de estaciones de campo, ya que se repiten y amplían en la secuela. Muchos de los consejos de esta guía siguen siendo válidos como base para orientarte en el nuevo título.

A medida que avances, necesitarás recursos específicos para mejorar armas, armaduras, herramientas o levantar estructuras concretas. Al igual que en el primer Grounded, lo normal es que haya guías dedicadas a cada material clave, pero entender cómo funcionan los sistemas centrales de análisis, ciencia y construcción te dará una ventaja enorme.

Las misiones siguen siendo un eje crucial para avanzar en la narración y desbloquear zonas, y no te mueves por un “mundo abierto” caótico sin rumbo, sino por un patio diseñado con rutas, laboratorios y objetivos bastante dirigidos. Tener esto en mente ayuda a que no te frustres si sientes que el juego no te deja ir a cualquier sitio desde el minuto uno.

Con todo lo anterior en mente, esta guía debería servirte tanto para sobrevivir a tus primeras horas en Grounded como para trazar un plan sólido si quieres exprimir hasta el último detalle del jardín: conocer bien la interfaz, usar el modo aracnofobia si lo necesitas, priorizar alimento y refugio, aprender a analizar recursos y subir Intelecto, entender el comportamiento de los insectos, completar laboratorios y chips de BURG.L, desbloquear todas las mutaciones, coleccionar datos y tarjetas de criatura, y, en general, afrontar con cabeza cada paso hasta alcanzar tu propia Super Victoria al 100%.

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